Eran como las 17:00 hrs de un 2 de octubre de 1968 cuando “El Chabelo” llega a uno de sus hogares para celebrar el cumpleaños número dos de Ricardito, fruto de una infidelidad con “La chata”.
Lázaro y Alejandro tienen 18 y 20 años respectivamente. Eran estudiantes del IPN. Ellos, alzan la voz, la sociedad los ve mal. Ellos reparten folletos con información valiosa. Alejandro habla siempre es buen orador. Desde pequeño era el maestro de ceremonias cuando le tocaban labores cívicas a su grupo. Lázaro es más bien inquieto. Tiene problemas con la autoridad.
Esa tarde mientras “El Chabelo” celebraba a su pequeño Ricardito, muchos inocentes murieron . Lázaro vio correr a su hermano cuando le dispararon los del ejército. Desesperado, entre la multitud intentó recoger el cuerpo ensangrentado de su hermano. Lázaro no pudo correr por mucho rato. Prefirió cobijarse en el cuerpo ya sin vida de Alejandro. Se hizo pasar por muerto. Prefirió cerrar los ojos y creer que nada de lo que estaba sucediendo es cierto. Piensa en que es mejor recordar cómo jugaban a las “luchitas” y Alejandro siempre lloraba. Es imposible. Su ojos no ven, pero sus oídos sólo escuchan gritos, llanto y balazos…
Pasa un tiempo y todo está en silencio. Al menos por un breve instante. Luego, escucha el sonido de un camión. Están levantando a los cadáveres. Lázaro abre por unos instantes los ojos y observa un panorama desolador: una madre muerta por las balas y en su regazo el cuerpo ya sin vida de su bebé, compañeros muertos, mucha sangre, mucho dolor….
Para “El Chabelo” el cumpleaños número dos de su Ricardito, para Lázaro un recuerdo imborrable y para Alejandro simplemente su último respiro…
"Un giro inesperado y todo el mundo que conocías desaparece para siempre"
ResponderEliminarPara un joven Antonio ese miércoles fue de entrenamiento de Judo en la mañana en Santo Tomás, al terminar se dirigió a Tlatelolco a un "evento" que tendría lugar más tarde. Llegó demasiado temprano, aún no había nadie. Cansado por el entrenamiento y aburrido de esperar sólo, decidió retirarse al ver venir el camión que lo acercaba a su casa. Llegó ya caída la tarde debido a la distancia, las noticias sólo reportaban un incidente ocurrido en Tlatelolco nada grave. Poco a poco se habría de enterarse del por qué quizá no volvería a encontrarse con Lázaro o con Alejandro.